El Festival Internacional de Cine de Barranquilla nació con un deseo común: posicionar a la ciudad en el mapa de la cinematografía mundial. La primera edición se realizó en el 2013 en el marco de los 200 años de la ciudad y su nombramiento como Capital Americana de la Cultura. La creciente producción cinematográfica en el país llevó a que en el 2012 se estrenarán cuatro largometrajes producidos y dirigidos por costeños, cifra favorable ante la escasa producción local. Precisamente con el fin de fortalecer la industria del cine en la Región Caribe y convertir a Barranquilla en una meca del cine caribeño se realiza el festival.